¿Y qué pasa con los días que aún no llegan?
Quiero verlos todos con tu ausencia cohibida
y de penas quietos;
sólo sol y sombra fresca.
Un tranquilo mediodía.
Los dos juntos, entre palmas.
De verde líquido alimentando la selva
oscura y mía, sólo mía,
para darte lo que no sabía que existiera.
miércoles, 5 de octubre de 2011
Espero te desvanezcas pronto, y dejes paso a la tranquila indiferencia que fue la rutina
Espero que esto sea suficiente como pago por los servicios prestados: no es posible besar a los ausentes
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